domingo, 13 de marzo de 2011

El Lugar del Crímen

Una noche de viernes a finales de los 90 (durante mi segundo año universitario) conocí en un bar a una chica deliciosamente extraña.
No recuerdo su nombre, pero sí que estaba de paso por mi ciudad, tan sólo ese fin de semana visitando a una amiga de su pueblo (uno muy bonito de Guipúzcoa) que estudiaba Enfermería por aquí cerca.

Vestía completamente de negro, tenía la cara pálida como un ángel y llevaba puestas las gafas de sol dentro de los bares... sólo bebía calimotxo (cantidades industriales) y se hacía los cigarrillos con tabaco de liar Golden Virginia.


Nos conocimos esperando en la cola del aseo, ella canturreaba una canción de Portishead y me uní a ella acabando la última frase de la estrofa.
Una hora después nos besamos y ella no tardó en pedir a su amiga las llaves del piso de estudiantes donde vivía.
"Yo ya he hecho lo más difícil –me diría cinco minutos después, mostrándome un reluciente juego de llaves de colores- ...ahora tú sólo tienes que llevarme, porque yo no tengo ni puta idea de cómo se va a esa casa... ¿sencillo eh?"

Por suerte el piso no estaba muy lejos.
Recuerdo perfectamente la entrada en aquel portal, las dificultades para encontrar la llave correspondiente a cada ranura, el largo pasillo del piso con todas las puertas alineadas a la derecha... y el salón del fondo con la puerta que daba al cuarto de su amiga.

Recuerdo que antes de tirarnos en la cama ella me pidió ayuda para quitarse las botas militares... que echó un vistazo a los cedés de la estantería y escogió uno... que lió un par de canutos y la siguiente hora y pico la pasamos colocándonos escuchando una y otra vez el "Wish you were here" de Pink Floyd.


Después de follar salí al pasillo desnudo, buscando el WC, iluminando mis pasos con un mechero, pero abrí la puerta equivocada y bueno... me gustaría pensar que aquella compañera de piso que, ligeramente sobresaltada (normal, sólo me faltaba la guadaña), me vio de aquella guisa entre penumbra... no se lo tomara excesivamente mal.

Ya en el servicio tuve que hacer frente a un inoportuno sudor frío que casi consigue hacerme vomitar la explosiva mezcla de cerveza rubia, Camel, calimotxo con mora, marihuana y rock sinfónico.
Falsa alarma.

Cuando regresé a la habitación ella estaba dormida como un tronco. Pulsé el stop en el radiocassette (donde sonaba la enésima repetición de "shine on you crazy diamond") y me vestí atropelladamente procurando no arrasar con cuanto se cruzaba a mi paso.

Bajé por las escaleras porque fui incapaz de encontrar el ascensor... y en el portal por fuera estaba su amiga, la legítima inquilina del piso, recién llegada y pulsando sin parar el botón del portero automático (maravillosos y "creativos" tiempos aquellos, sin móviles ni internet)... abrí la puerta y ella mostró un ligero alivio.
"¡Ah, eres tú! Por fin, llevo cinco minutos tocando el timbre y nadie contesta"
Imaginé a la compañera de piso acojonada, hecha un ovillo en su cama tapada hasta las orejas, sin atreverse a salir a contestar los timbrazos por miedo a cruzarse nuevamente conmigo en el pasillo, dispuesto a llevármela con mi letal Santa Compaña...

"Pues espero que tengas mejor suerte (la vas a necesitar) arriba en la puerta", contesté a modo de despedida, desapareciendo en la calle sin más miramientos.


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¿Por qué me he acordado de repente de esta historia? Pues porque la vida a veces es de lo más cómica... y caprichosa.

Hace un par de noches una chica me llevó a su piso de estudiante y según nos acercábamos no me lo podía creer... era la misma calle, el mismo portal.
El piso ignoro si era también aquel que visité furtivamente trece años atrás, pero una vez dentro el flash-back fue brutal: idéntico pasillo, las habitaciones con la misma disposición... ¡podría serlo!
Casi me da la risa cuando me dijo que su cuarto era el último de todos, la famosa última puerta a la derecha.


En la cama la cosa no resultó demasiado bien, fue una experiencia de lo más mecánica y desapasionada, de hecho apenas me quedé cincuenta minutos escasos en esa casa... pero eso sí, después del primer decepcionante polvo me dio tiempo a tumbarme un minuto en silencio en aquella cama y, cerrando los ojos, recordar vívidamente mi anterior visita al inmueble.

Pensé en aquel ángel del Norte y ante la sorpresa de mi acompañante comencé a cantar en voz alta "how I wish... how I wish you were here..."



33 comentarios:

Ana dijo...

Jajajajjajaja te pasa de todo, pero mira el lado bueno, follas bastante.

Un besito

Musicalera dijo...

Un deja vú en toda regla...buena entrada, si señor!!. Un besito

Mr. Rific dijo...

ANA PEPINILLO: Esa última noche lo que mejor hice fue cantar, porque lo otro fue un pelín desastre...

MUSICALERA: Yo cada vez creo menos en ciertas coincidencias, o en las casualidades... :)

Xana dijo...

Da que pensar no?
trece años son muchos años!!!

Melvin dijo...

Caprichos del destino que a veces nos lleva a lugares y sensaciones ya vividas...O sobrevividas. Jejeje.Un abrazo.

Mr. Rific dijo...

XANA: ¡Y tanto que da que pensar! Yo tengo claro más o menos el sabor que me queda con todo esto, pero me interesaría saber desde fuera qué se pensaría ante una situación similar... en tu caso Xana, ¿qué te sugiere?

MELVIN: Muy buen apunte, el matiz de la supervivencia.
Y por qué no, acabar de una vez por todas con esa maldita connotación negativa que tiene eso de "tropezar dos veces con la misma piedra".
No pocas veces esos tropiezos molan...

Chica Mala dijo...

Pues a mí me parece una historia chulísima, las casualidades tienen algo como, no sé, inquietante, como si estuviera a punto de pasar algo más; y que sepas que Wish you were here es una de mis canciones favoritas.
Beso

Mr. Rific dijo...

LA NIÑA MALA: Tienes razón, cuando cosas así suceden uno no puede evitar mirar alrededor (o al frente) y pensar: ¿y ahora qué? ¿qué será lo siguiente?
Pero siempre con una sonrisa...

Y sobre la canción, siendo una de tus favoritas, espero que la versión de Limp Bizkit que ilustra la entrada no te haya disgustado ni te parezca un sacrilegio ;)

Cris* dijo...

Yo no creo mucho en casualidades y además me dan un poco de mal royo lo verdad xD.
Pero en este caso te dejo buen sabor de boca no? xD.

Besitos.

PD: Siento debilidad por Limp Bizkit y la canción creo que la dejan en buen lugar.

Olivier dijo...

No solo follas sino k repites en los mismos sitios... con tias distintas. Te mereces un 8´75 por lo menos.
;-)

Mr. Rific dijo...

CRIS*: Casualidades así puede que den algo de yuyu pero dependiendo de sus desenlaces no deben causar mal rollo...
P.D: una de mis canciones de cabecera de LB es "the one" ;)

OLIVIER: ¡Gracias por la generosa nota! Supongo que para obtener el sobresaliente tendré que acabar tripitiendo el lugar con otra chica distinta... ¡a ver si tardo menos de 13 años en conseguirlo!

Cris* dijo...

Me alegro que en este caso fuera una casualidad agradable y más si recibes 8'75 jaja.

PD: de LB me tiene loca "My generation", pero para mí no habrá ninguna como "Behind blue eyes"
Besos.

Oceanchild Julia dijo...

Kalimotxo con mora + marihuana + rock sinfonico = una combinación perfecta :)

Esta historieta es genial, yo estaría en shock si me pasara algo asi...
Esperemos que esa segunda vez en aquel piso no te haya borrado los buenos recuerdos de la primera vez.

Dama del Castillo dijo...

Fíjate, de la primera experiencia en "ese" piso saliste por patas, y comparada con esta vez va a resultar que no fue tan mal...

Un saludo.

panterablanca dijo...

Pues leyendo los comentarios, no sé si lo he entendido bien. Yo he entendido que la primera vez con el ángel vestido de negro fue estupenda (aunque muy resacosa), pero en cambio, la segunda fue algo digno de olvidar. Pues nada, olvida la segunda y quédata con la primera, aunque con esta coincidencia o juego del destino no sé si podrás olvidar tampoco la segunda, jajajaja!!
Besos felinos.

Anónimo dijo...

Casualidades de la vida. Lo malo fue la comparación del antes y el después no? jeje

Por cierto, un gusto musical exquisito para la primera.. como adoro ese disco!

Mr. Rific dijo...

CRIS*: Precisamente el "behind blue eyes" original de los WHO ilustraba la anterior entrada de este blog titulada "El Malo de la película"... veo que nos entendemos ;)

OCEANCHILD JULIA: Lo que espero es no acabar confundiendo los detalles y adjudicando méritos o deméritos a quien no corresponde (¡empezando por mi!)... justicia ante todo.
Y de paso mira, ahora ya conozco la receta perfecta para que lo pases bien si algún día coincidimos :D

DAMA DEL CASTILLO: Eso es, tampoco descartes que se haga uno viejo y a la hora de comparar, la nostalgia resulte invencible al enfrentarse con nuevas y anodinas experiencias... y al menos esta vez ya conocía el camino de salida!!! :)

PANTERABLANCA: Si hay que quedarse con una prefiero la primera "invasión", pero ahora lo que más me preocupa es ver si acaba habiendo una tercera dentro de un tiempo, para así rizar definitivamente el rizo y que Olivier saque la tablilla del "10"... :P

BITELINO: Las comparaciones son odiosas, pero aquella primera chica era todo un personaje, de lo más interesante.
Y de los PINK FLOYD yo prefiero el "Dark side of the moon", pero el arranque del "Wish you were here" es de los más impresionantes de la historia del pop/rock...

Cheester dijo...

Pues si, estas coincidencias dan yuyu y mucho... parece el tipico error de Matrix, YO YA HE ESTADO AQUI xD

En fin... espero que no tengas que volver en unos años...

Mr. Rific dijo...

CHEESTER: Bah, en este caso tampoco es para tanto... peor es cuando te entra un flash-back jodido en un bar donde hace años te pasó algo chungo, en una calle o en una plaza...
Aquí aunque se trata de un "regreso al lugar del crímen", el elemento sexual lo hace mucho más digerible :D

Bubo dijo...

¿Te has pensado comprarte un piso en esa calle?

Mr. Rific dijo...

BUBO: ¡Tomo nota de la sugerencia! (no es mala zona para vivir esa, pero... ¿para qué?
Resulta mucho más seductor ser invitado a visitarla por esos motivos una vez cada década... :P

neko dijo...

Pues a mi me encantan este tipo de coincidencias, al menos hizo que esta segunda vez vayas a recordarlo por algo mas.

Por cierto que oportuno el significado de la canción que canturreabas siendo que preferiste la otra, no?? jajaja

Mr. Rific dijo...

NEKO: Y tanto que fue oportuna la canción, puesta (como vulgarmente se dice) "a huevo".
Y es que a veces las casualidades las carga el mismísimo Diablo... ;)

neko dijo...

que malo eres, pobre muchacha!!!!!!!!
me encanta! :D

Mr. Rific dijo...

NEKO: Eh, que flash-backs aparte, yo en la cama también canto (y doy el cante) de vez en cuando... forma parte de mi imprevisible show :D

el Sr. Skywalker dijo...

Hola, Mr. Rific.

Es mi primera vez en tu blog, que he conocido de rebote y me encanta. Me agrego si no te importa. Nos leeremos.
.......

No sé qué tiene de extraña tu historia.
A todo el mundo le ha pasado alguna vez que ha aparcado su nave espacial en la misma plaza de parking unos años después. ¿No? Incluso con naves distintas.

Es la ley de la galaxia: unos follan y otros aparcan.

Snif.

Saludos y que La Fuerza te acompañe... Aunque veo que no te hace falta.

Mr. Rific dijo...

SR.SKYWALKER: ¡Bienvenido al blog! Sobre todo procediendo de una galaxia tan lejana (pero a la vez tan familiar, me encanta la 1ª trilogía)... te ruego aceptes la tradicional Fanta de recibimiento y espero no te defraude el contenido de este rincón del Imperio.

Y tienes razón, no es la primera vez que el Halcón Milenario tras alcanzar el hiperespacio acaba asomando en medio del mismo campo de esteroides...
Lo dicho, espero seguir notando conmociones en la Fuerza por futuras visitas suyas :D

El Desastre Laná. dijo...

encantada de comentarte.
graciosos textos :D.

Mr. rific, saludos, y no distance left to run.

Lan.

Mr. Rific dijo...

EL DESASTRE LANÁ: ¡Bienvenida al blog! Espero no defraudarte en sucesivas visitas... aprovecho para alabar (al igual que con la prota de esta entrada) tu buen gusto musical :D

Princesa Negra dijo...

El criminal siempre vuelve al lugar del crimen.

Mr. Rific dijo...

PRINCESA NEGRA: Pues espero que esa célebre frase no se cumpla en todos los casos, porque hay lugares del crímen que yo no volvería a pisar... ¡ni loco!

luchadora dijo...

Eso no fue coincidencia, eso fue una señal del destino amigo!! jajaja

Un saludo.

Mr. Rific dijo...

LUCHADORA: Eso pienso yo, o una broma del destino más bien... pero que conste que no me importaría volver a ciertas casas donde me acogieron amablemente (y con nuevas inquilinas mejor todavia) :D